Seguidores

Agrégame como amigo

NUEVA PÁGINA


viernes, 4 de junio de 2010

UN ASTEROIDE IMPACTA SOBRE JUPITER

Astrónomos aficionados detectan el impacto de un asteroide en Júpiter.
Anthony Wesley, el astrónomo aficionado cuyo nombre dio la vuelta el mundo hace casi un año al descubrir la impresionante cicatriz del tamaño de la Tierra dejada en Júpiter por un asteroide, ha vuelto a dar en el clavo.

Esta vez, compartirá la fama con otro colega filipino, Christopher Go. Ambos han detectado el impacto de otro objeto, posiblemente un asteroide o un cometa, contra la superficie de Júpiter en el mismo momento en el que se producía.

El choque, ocurrido este jueves, pudo ser grabado en vídeo por ambos observadores. Son sólo unos breves segundos, pero suficientes para distinguir un destello luminoso entre las nubes del gigantesco planeta del Sistema Solar.

Las fulminantes imágenes, que pueden verse en el sitio especializado spaceweather.com y en la web de Wesley, no dejan lugar a dudas de que algo colosal ha colisionado contra Júpiter, aunque todavía no se ha detectado la posterior marca oscura que suelen dejar este tipo de objetos celestes y que podría indicar el tamaño real del bólido.

«Todavía no puedo creer que haya captado en directo un impacto en Júpiter», exclama Christopher Go. Wesley ya es veterano en estas lides. El 19 de julio de 2009, el australiano detectó con el telescopio de 14,5 pulgadas que tiene instalado en el patio de su casa en Murrumbatemann, al norte de Camberra, las consecuencias de un impacto en el planeta, un fenómeno único que no había sido visto por el ojo humano desde 1994 con el cometa Shoemaker-Ley.

Fue uno de los acontecimientos astronómicos más impactantes de los últimos tiempos y tan sorprendente que, al principio, el propio Wesley pensó que se trataba de una tormenta.

Un paraguas de la Tierra

Las fotografías del aficioando fueron publicadas por medios de comunicación de todo el mundo. El choque cósmico, además de dejar una inmensa cicatriz del diámetro de la Tierra, provocó una inmensa nube negra de 5.000 kilómetros, rodeada por un halo que alcanzó los 8.000, según un estudio realizado por investigadores españoles. Los científicos podrán decir en los próximos días cuáles han sido las consecuencias del nuevo choque.

En cierto sentido, Júpiter es un paraguas protector de la Tierra, ya que con su enorme gravedad atrae fuertemente hacia sí los objetos errantes del Sistema Solar que pasan por sus proximidades, evitando que lleguen hasta nosotros.

FUENTE: ABC.ES

No hay comentarios:

Publicar un comentario