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jueves, 5 de mayo de 2011

David Wilcock, el enigma 2012 - 01

The 2012 Enigma by David Wilcock 01 from Rafael Palacios on Vimeo.

La actividad solar está en aumento

Si alguna vez ha estado parado frente a una estufa caliente, observando una olla con agua mientras esperaba con impaciencia que el líquido hierva, entonces sabe lo que se siente si se es un físico solar.
En 2008, el ciclo solar se sumergió en su más profundo mínimo solar en aproximadamente un siglo. Todas las manchas solares desaparecieron, las llamaradas solares disminuyeron y el Sol estuvo inquietantemente tranquilo.

"Desde entonces, hemos estado esperando un incremento en la actividad solar", comenta Richard Fisher, quien es el jefe de la División de Heliofísica, en las oficinas centrales de la NASA, ubicadas en Washington DC. "Han sido tres largos años".

"Esa fue la eyección de masa coronal (coronal mass ejection o CME, por su sigla en idioma inglés) más veloz registrada en casi seis años", comenta Angelos Vourlidas, del Laboratorio de Investigación Naval, en Washington DC.

"Me recuerda a una serie de eventos similares que ocurrieron en noviembre de 1997, los cuales iniciaron el ciclo solar número 23, que es el ciclo solar que antecede al presente".

"Para mí", agrega Vourlidas, "esto marca el inicio del ciclo solar número 24".La lenta acumulación del evento, hasta llegar al presente, es más que tan sólo "la infructuosa observación de una olla que no hierve", comenta Ron Turner, un analista del clima espacial de la firma Analytic Services.

"En verdad, ha sido históricamente lenta".

Los períodos de calma solar no son nada nuevo. Suceden aproximadamente cada 11 años; constituyen una etapa natural del ciclo solar.

Sin embargo, este mínimo solar particularmente fue más largo de lo usual, provocando de esta manera que algunos investigadores se pregunten si en algún momento iba a terminar.

Noticia de último momento: La olla está comenzando a hervir. "Finalmente", comenta Fisher, "estamos empezando a ver algo de acción".

Durante el período que ha transcurrido en el año 2011, las manchas solares han regresado y están repletas de actividad.

El 15 de febrero, y de nuevo el 9 de marzo, satélites en órbita alrededor de la Tierra detectaron un par de llamaradas solares de "tipo X" (el más poderoso tipo de llamaradas de rayos X). La última de tales erupciones ocurrió en diciembre de 2006.

Otra erupción, la cual tuvo lugar el 7 de marzo, lanzó una nube de plasma de mil millones de toneladas hacia afuera del Sol a una velocidad de 2.200 kilómetros por segundo (5 millones de millas por hora).

La veloz nube expansiva no se movía en la dirección en la cual se encontraba la Tierra, sin embargo, provocó un impacto detectable en el campo magnético de nuestro planeta.

El impacto indirecto, ocurrido el 10 de marzo, fue suficiente como para provocar que las auroras boreales se esparcieran por la frontera canadiense hasta el interior de algunos estados de Estados Unidos como: Wisconsin, Minnesota y Michigan.

Desde que los investigadores comenzaron a registrar y a numerar los ciclos solares, a mediados del siglo XVIII, han ocurrido 24 de ellos.

En un artículo recientemente aprobado para su publicación por la revista Space Weather Journal, Turner muestra que, durante todo ese tiempo, solamente cuatro ciclos solares han comenzado en un modo más lento que el actual.

"Tres de ellos ocurrieron en el mínimo de Dalton, un período de depresión en la actividad solar que tuvo lugar a principios del siglo XIX. El cuarto fue el mismo ciclo 1, el cual se produjo alrededor del año 1755, también un período solar relativamente bajo", agrega.

En este estudio, Turner utilizó las manchas solares como indicador principal para cuantificar la actividad solar. Las avalanchas recientes de manchas solares no afectan de manera sustancial sus conclusiones: "El ciclo solar número 24 es de lento inicio", finaliza.

Fuente: laflecha

ScienceCasts: Solar Activity (Puede subtitularse en español)

El FBI libera información sobre el fenómeno OVNI - Extraterrestre

Yohanan Díaz presenta la información sobre la desclasificación de archivos OVNI de parte del FBI en Estados Unidos.

Avistamientos OVNI y casos de extraterrestres vs humanos en Brasil

Yohanan Díaz presenta información sobre videograbaciones OVNI en Brasil y los casos en los que seres extraños y extraterrestres han atacado a humanos en territorio Brasileño.

El proyecto cósmico ruso Radioastrón podría revolucionar la exploración del espacio

Los científicos rusos han construido un telescopio que no sólo permitirá ver el universo con una precisión sin precedentes, sino que también ayudará a despejar las dudas sobre la existencia de civilizaciones extraterrestres.

El telescopio se lanzará en le marco del gran proyecto espacial ruso Radioastrón, que promete causar verdadera sensación en el campo de la exploración del espacio.

Según sus diseñadores, el aparato permitirá ver nuestro universo con una exactitud sin precedentes.

“Este proyecto amplía los límites del saber, permite investigar en un nivel radicalmente nuevo lo que nos rodea: nuestra galaxia. Es por eso que puede considerarse único”, comenta el ingeniero principal de Radioastrón, Vladímir Babyshkin.

Algunos investigadores admiten que apenas se conoce el 4% del universo. La sed de descubrimientos es lo que motiva a la gente a diseñar nuevas herramientas de exploración del espacio.

Los expertos están seguros de que el Radioastrón ayudará a revelar misterios tales como la posible existencia de civilizaciones extraterrestres y la posibilidad de viajar en el tiempo.

“Este aparato será cien veces más efectivo que sus análogos ya existentes. Por ejemplo, el agujero negro que está en el centro de nuestra galaxia, está siendo estudiado con ayuda del telescopio Hubble.

Pero nosotros podremos verlo cien veces mejor”, asegura Ígor Lisov, columnista de la revista Novosti Kosmonavtiki.

En la superficie terrestre hay varios telescopios de gran alcance, pero con estos no se puede 'echar un vistazo' a los rincones más lejanos del universo.

Hace falta unificar los sistemas terrestres y espaciales para que formen un gigantesco telescopio.

El principal puesto de control de esta misión se sitúa en la provincia de Moscú, donde trabajan hombres que han dedicado casi un tercio de su vida a este ambicioso proyecto.

“La idea surgió hace 30 años. Se necesitó mucho tiempo para realizar el proyecto debido a su complejidad. El lanzamiento estaba previsto para principios de los años 90, pero se desintegró la Unión Soviética. Y entonces todo fue pospuesto por falta de financiación”, dice Anatoli Kovalenko, doctor en física y matemáticas.

Ahora el programa está en su recta final. Se prevé que en julio del presente año el telescopio, cuya forma recuerda a una enorme flor dorada, estará listo para partir al espacio.

Los científicos están cruzando los dedos y esperan con mucha emoción poder celebrar este renacimiento de la ciencia cósmica rusa.

Fuente: RT