Siete poderosos nerds de seguridad cibernética tienen el poder de reiniciar la red después de un evento catastrófico.
Se trata de preservar y proteger Internet.
Una tarea asignada al ICANN (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers), una organización que opera a nivel internacional, siendo la responsable de asignar las direcciones del protocolo IP, de los identificadores de protocolo, de las funciones de gestión del sistema de dominio y de la administración del sistema de servidores raíz.
Al parecer, este organismo -dedicado a preservar la estabilidad de Internet- guarda bajo siete llaves la clave para poder reiniciar la Red.
Siete individuos elegidos por su desarrollo e integridad digital miembros de una sociedad de seguridad ciebernética cuentan con una llave capaz de reiniciar parte del internet en caso de sufrir un atentado a su infraestructura. O al menos los DNS atacados (que en caso de fallar, a menos que tengas las IP’s de las páginas apuntadas en una libretita interminable, sería como si fallara todo).
Estos individuos al parecer no tienen nada que ver con los Iluminati o con el poder de Barack Obama de apagar la red en caso de una emergencia.
La comunidad de la llave del Internet está formada por:
Paul Kane (Gran Bretaña)Dan Kaminsky (Estados Unidos)Jiankang Yao (China)Moussa Guebre (Burkina Faso)Bevil Wooding (Trinidad and Tobago)Ondrej Sury ( República Checa)Norm Ritchie (Canadá)
En realidad más que un poderoso grupo político estos individuos son nerds que trabajan en seguridad cibernética y que han diseñado el sistema de protección DNSSEC, que garantiza a los consumidores que el sistema será reiniciado después de una catástrofe.
Se necesitan 5 para hacerlo y se reunirían en una locación segura en Estados Unidos.
En realidad las llaves son tarjetas de bandas magnéticas y sólo reinician la parte de la red que utiliza este sistema.
La razón por la que haga falta al menos cinco personas, es que cada tarjeta-llave tiene únicamente una parte de la clave de recuperación necesaria para resetear su sistema.
La idea, simplificada, es que en un caso de catástrofe, el DNSSEC (Sistema de Seguridad del Dominio de Nombres) podría resultar dañado, de forma que los servidores DNS serían incapaz de ver si una dirección web está a puntando correctamente a la dirección IP correspondiente.
La selección de los siete "llaveros", la "claves" son tarjetas magnéticas, y esta destinado a tranquilizar a los consumidores que el sistema seguirá trabajando incluso en el caso de un desastre mayor. Sería sólo afectan a los sitios web usando DNSSEC.
Fuente: Gawker
No hay comentarios:
Publicar un comentario